Índice
DIA 1: VIERNES 14 FEBRERO: MADRID – EDIMBURGO
En Febrero de 2020, hicimos una pequeña escapada a Escocia en 4 días, principalmente para visitar Edimburgo, una de las ciudades más bonitas de Reino Unido, aunque también nos dio tiempo a visitar dos bonitos pueblos, con castillos y palacios, lugares de nacimiento y residencia de reyes escoceses: Linlithgow y Stirling.
Salimos de Madrid en un vuelo de Easyjet, a las 12:20, llegando a la capital escocesa a las 14:20 (3h de vuelo, pero allí es una hora menos). El precio fue de 270€, 2 adultos y una niña de 2 años (ya no se considera bebé y paga su asiento). En navidades, los precios estaban prohibitivos.
EDIMBURGO
Para ir del aeropuerto de Edimburgo a nuestros apartamentos (Staycity Aparthotels West End), tomamos el Bus 100 Airlink:
Bus 100 Airlink: Airport – Haymarket (7 paradas, 17’, cada 8′) (£7.50/p)
Airport (Stop D), Maybury, Drum Brae South, Edinburgh Zoo, Western Corner, Murrayfield, Wester Coats, Haymarket Station
Desde la parada del bus en Haymarket, a los apartamentos hay 10′ andando. Los apartamentos estaban impecables, se notaba que eran prácticamente nuevos. Son varios bloques de edificios (prácticamente una manzana entera) con apartamentos turísticos.
Desde los apartamentos a Grassmarket (ya en la Old Town) hay unos 20′ andando, al menos a nuestro ritmo con el carrito de la niña. Hasta el castillo, unos 25′. Creemos que fueron una muy buena elección, pues los alojamientos en esta ciudad son muy caros. A nosotros nos salió por 90€, la noche. En Grassmarket comenzamos nuestra visita a esta bonita ciudad.
Grassmarket
Se trata de una preciosa plaza que se abre a los pies del Castillo. En su día en esta plaza se llevaban a cabo las ejecuciones públicas sobre los patíbulos, aunque también ha sido testigo de quema de brujas y disturbios callejeros:
Aparte de las bonitas casas y fachadas de la plaza, merece la pena detenerse en algunas de ellas, ya que varias hacen referencia a episodios macabros de la ciudad, y es que Edimburgo, es una ciudad muy dada a este tipo de historias intrigantes. Es parte del encanto de esta maravillosa ciudad:
Fiddler’s Arms (Grassmarket, 9-11)
A comienzos del S. XIX la ciencia anatómica tenía uno de sus más brillantes centros en Edimburgo. Hasta ese momento las disecciones humanas con fines educativos se habían llevado a cabo gracias a cadáveres procedentes de ejecuciones, muertes en prisión, suicidios … En 1820, se despenalizó la pena capital de muchos delitos, por lo que los cuerpos procedentes de ejecuciones legales fueron menguando cada vez más. Eso provocó que florecieran los body snatchers (ladrones de cuerpos) que forzaban las tumbas para robar los cadáveres y venderlos en la universidad, estableciéndose un mercado negro entre profesores, alumnos y ladrones sin escrúpulos. Si das una vuelta por el cementerio de Greyfriars, incluso podrás ver tumbas con rejas metálicas (mortsafes) para evitar los robos de cadáveres…
Los ladrones de cuerpos más famosos fueron Burke & Hare, dos irlandeses que llegaron a Edimburgo a principios del S. XIX y perpretaron varios crimenes en la pensión (Tanner’s Close) que regentaba el segundo de ellos. Mataron a gente mayor o sin recursos, presas fáciles a las que emborrachan, luego asesinaban (asfixiandolos, en una técnica que se bautizó como burking, en referencia al apellido de uno de ellos) y posteriormente vendían sus cuerpos, al no reclamarlos nadie. Se los vendían al profesor Robert Knox, la eminencia en el campo de la anatomía en ese momento. El negocio les fue tan fuctífero, que mataron a 16 personas en 11 meses, convirtiéndose en unos asesinos en serie, y los criminales más famosos de Escocia. Un error con una de sus víctimas, hizo que Hare traicionara a Burke, y pudo conseguir inmunidad a cambio de la confesión completa y pruebas de todos los crímenes que llevaron a cabo. Aunque el doctor John Knox no fue acusado por falta de pruebas, la opinión pública se puso en su contra y en los periódicos y las calles se le acusaba de haber inducido a Burke y Hare a cometer sus crímenes a cambio de dinero. Una de las muchas rimas populares de la época en Edimburgo decía así: Up the close and doon the stair, But and ben’ wi’ Burke and Hare. Burke’s the butcher, Hare’s the thief, Knox the boy that buys the beef.
La ejecución de Burke tuvo lugar en enero de 1829 en Lawnmarket, junto a St Giles, frente a un público de 25.000 personas. Hare fue liberado una semana después de la ejecución de Burke y abandonó Edimburgo disfrazado y escondido en un carro del correo, dicen que acabó como vagabundo y ciego por las calles de Londres…
En este pub, Fiddler’s Arms, hay una placa que dice que aquí paraba una de las víctimas de Burke & Hare, un joven italiano llamado Ludovico, que hacía espectáculos callejeros con ratones blancos. Se dice que su espíritu todavía mora por la plaza:
The Last Drop (Grassmarket, 74-78)
Este pub con el símbolo de la horca y decorado en el interior con todo tipo de referencias al patíbulo, hace referencia también con su nombre The Last Drop (El último trago), a la última voluntad de muchos condenados a la horca antes de morir: echar un último trago (a ser posible de whisky):
Maggie Dickson’s (Grassmarket, 92)
Este pub hace honor a la historia de Maggie Dickson’s (La Medio Colgada), una mujer acusada de cometer adulterio, que fue condenada a la horca. Por fortuna para ella, no se partió la columna vertebral y tan sólo se quedó sin oxígeno, quedando inconsciente. Como la pena de la condena era ser ahorcada (pero no morir en la horca) y no se podía juzgar dos veces por el mismo delito, quedó absuelta (y de ahí su nombre de medio colgada):
Greyfriars
En la zona aledaña a Grassmarket, aparece el barrio de Greyfriars. Aquí hay un cementeriom Greyfriars Kirkyard (26A Candlemaker Row) que alberga dos historias, completamente contrapuestas:
Greyfriars Bobby
Bobby era un perrito Skye Terrier (originario de la isla de Skye, en Escocia) que perteneció a John Gray, un sereno que murió en 1858 de tuberculosis. Su fidelidad hacia su amo fue tal, que permaneció 14 años junto a la tumba de su amo.
Hay una estatua al perro en la entrada al cementerio y en su interior, hay una lápida donde la gente deposita palos. Se trata de todo un simbolo de la ciudad:
La parte truculenta del cementerio, lo pone el llamado Poltergeist Mackenzie. Cuando en el S. XVII nació un movimiento religioso contrario a la monarquía, sus seguidores, llamados covenanters, fueron perseguidos y encerrados en una prisión ubicada en este cementerio. De los 1200 que fueron encerrados, algunos fueron ejecutados y otros cientos murieron del maltrato recibido.
El fiscal responsable de las ejecuciones fue William Mackenzie, que por su crueldad fue llamado Bloody Mackenzie, el Sangriento Mackenzie. A su muerte, fue enterrado en el llamado Mausoleo Negro del cementerio.
La parte macabra viene cuando a finales del siglo pasado, un vagabundo forzó la entrada del mausoleo para evitar el frío, fue agredido por una fuerza invisible, produciendole cortes y quemaduras, tal y como contó a la policía en su declaración posterior. La policía, lógicamente no le hizo ni caso, pero cual fue su sorpresa, cuando a lo largo del tiempo empezaron a reportarse casos de personas que sufrían mordeduras, cortes y desmayos en las proximidades de la antigua prisión de covenanters. Hubo tantos casos, que el ayuntamiento procedió a cerrar al público esa parte del cementerio…
Dicen que la entrada del vagabundo despertó al espíritu de Mackenzie, y que se ha convertido en uno de los fenómenos poltergeist más activos del mundo. Quizás esa sea la razón que la Universidad de Edimburgo cuenta con departamento de Parapsicología…
Es muy popular en Edimburgo, hacer visitas guiadas nocturnas para que te cuenten todas estas historias truculentas, ya que es una ciudad muy dada a ello. Un compañero de trabajo nos contó que hizo una visita guiada nocturna al cementerio, y que una vez finalizada la visita cuando volvieron a la entrada la puerta estaba cerrada, y hasta el guía estaba cagado de miedo. ¿Sería el espíritu de Mackenzie burlándose de los pobres turistas?
Museo Nacional de Escocia (Chambers St)
Horario: 10:00 – 17:00. Entrada gratuita.
Merece mucho la pena, si tienes algo de tiempo en la ciudad, visitar este museo. Es gratuito y muy ameno. Si vas con niños, se lo van a pasar genial:
A nivel arquitectónico, el edificio en sí mismo es precioso. Nosotros hicimos una visita muy express, de menos de una hora, pero nos dio tiempo a ver algunas cosillas: la oveja Dolly, el bonito Ajedrez de Lewis o pasar un rato en la terraza, con vistas panorámicas.
Grand Gallery
Espectacular galería donde destaca el techo de cristal de más de 80 metros de largo y 24 metros de alto:
Oveja Dolly (Explore, Level 1)
Se trata del primer mamífero clonado a partir de una célula adulta. Sus creadores fueron dos científicos del Instituto Roslin. Se creó como parte de una investigación para producir medicamentos en la leche de animales de granja:
Ajedrez de Lewis (Kingdom of the Scots, Level 1)
Se trata de parte de las piezas de ajedrez, de origen medieval, encontradas en la Isla de Lewis (Escocia). El resto de las piezas (la gran mayoría) se exhiben en el British Museum (Londres). Las piezas están talladas en marfil de morsa, presumiblemente son de origen escandinavo (Baja Edad Media, S. XII). Las figuras se encuentran en perfecto estado, exquisitamente talladas y dotando de gran expresividad a sus caras:
Rooftop Terrace (Level 7)
Merece la pena subir a la terraza, las vistas no son del todo limpias, pero sí que hay una buena vista del Castillo y alrededores:
George IV St
Esta calle mezcla edificios imponentes como la Biblioteca Nacional de Escocia, con algunos comercios de vivos colores:
También es muy curioso, esta antigua iglesia que se ha transformado en el Frankenstein Pub, el cual cuando cae la noche está tétricamente iluminado:
The Elephant’s House (21 George IV Bridge)
Paramos a merendar en esta cafetería, muy frecuentada por la escritoria J.K.Rowling, creadora de la saga de Harry Potter, pasando de ser una desempleada con graves problemas económicos a una de las personas más ricas de Reino Unido. El interior no hace sospechar nada que aquí se aburrantaran los libros de la saga, salvo si visitas los baños, llenos de pintadas de frikis de la serie:
Victoria St
Preciosa calle con forma curvada, lleno de escaparates y casas de vivos colores. Nos gustó más por el día:
Dicen que esta calle, inspiró a J.K Rowling, en la creación del callejón Diagon, un mercado para magos., donde estos compran los suministros necesarios. Así que no podía faltar en esta calle una tienda de Harry Potter, que venden todo tipo de parafernalia para los fans de la saga:
Royal Mile
Se trata de la calle más famosa de la ciudad y verdadero eje de la Old Town. Su longitud es de 1,81 km, que es aproximadamente lo que mide una milla escocesa (más larga que la milla inglesa). Nos conformamos con dar un pequeño paseo de reconocimiento en este primer día:
Camera Obscura
Museo muy popular (a raíz de las colas que vimos en días posteriores) donde a través de cinco plantas se usan trucos, hologramas, ilusiones ópticas, imágenes en 3D, acertijos, túneles de colores o espejos, para pasar un rato divertido. Recomendado para familias con niños:
Castillo
Emblema de la ciudad y atracción más popular, está levantado sobre una roca de origen volcánico. A pesar del precio de la entrada, la visita a su interior es imprescindible a nuestro parecer:
Una de las características más significativas de la Old Town, es la presencia de decenas de closes (o callejones) interiores, donde en la Edad Media se amontonaban miles de personas en condiciones precarias, que derivó en episodios de enfermedades como la peste.
James Court
Esta plazoleta se edificó con casas de lujo hacia 1725. Todavía no se había construido la parte nueva de la ciudad (New Town), así que un lugar con espacio y limpieza era un gran privilegio. Uno de los habitantes más famosos fue el filósofo David Hume:
Makar’s Court
Este callejón destaca porque en su suelo hay frases célebres de escritores grabadas en la piedra. Está justo al lado del Writers’ Museum
Writers’ Museum
El Museo de los Escritores muestra la vida (manuscritos, libros, retratos, objetos personales, …) de tres grandes autores de la literatura escocesa: Robert Burns (poeta romántico), Sir Walter Scott (Ivanhoe, Rob Roy) y Robert Louis Stevenson (La isla del tesoro, El extraño caso del Dr Jekyll y Mr Hyde):
Deacon Brodie
Este pub se inspira en la figura del Diácono Brodie, un respetable hombre de negocios que vivió en el Edimburgo del S. XVIII. De día, trabajaba como ebanista y cerrajero para las familias más pudientes de la ciudad; de noche, utilizaba las copias de las llaves para entrar en sus viviendas y robarles:
Esta doble moral inspiró a Robert Louis Stevenson, quien la convirtió en el leit motiv de su famosa novela El extraño caso del Doctor Jekyll y Mr Hyde, quedando muy bien retratado en el doble cartel de este pub.
En cuanto al pobre Brodie, no tardó mucho en descubrirse su doble vida, y fue condenado a la horca.
St Giles Cathedral
Construida a partir del S. XII, es considerada la iglesia madre del presbiterianismo (protestantismo en Gran Bretaña).
Su elemento exrerior más característico es su preciosa cúpula en forma de corona real:
Staycity Aparthotels West End (Brandfield St)
El día no dio para mucho más, hicimos la compra en un supermercado en las cercanías de los apartamentos y nos fuimos a descansar para estar frescos para continuar con las visitas al día siguiente.
Un comentario en «Diario Escocia (Febrero 2020): Día 1: Edimburgo»